DIAMANTE NEGRO



La trufa negra es un hongo que destaca y ha tomado fuerza en la gastronomía internacional durante las últimas décadas, sobre todo en Italia, España y Francia.

El origen de la trufa negra se remonta a la Edad Antigua. Ya faraones egipcios hacia el 1500 AC, incluían la trufa en sus platos y la consideraban un alimento preciado. Los babilonios preparaban recetas como el faisán trufado y, posteriormente los romanos, utilizaron la trufa de manera regular en sus cocinas. LA TRUFA NEGRA  se hizo tan deseable que se crearon leyendas sobre su origen divino y sus altas cualidades. De hecho, los romanos le atribuyeron poderes afrodisíacos.

Con el paso de los siglos, la trufa negra mantuvo su preciado valor, formando parte de las mesas de más alto nivel. Su precio era tan elevado que solo la nobleza y las cocinas de alto poderío eran capaces de incluirla en sus recetas.





 Fettuccine en salsa de queso y trufa negra.





La Exposición Universal de París de 1855 sirvió para propagar la trufa negra a nivel mundial y fue Anthelme Brillat-Savarin, filósofo gastronómico y creador del primer tratado gastronómico, quien denominó a la trufa negra como el “DIAMANTE NEGRO”.    




En esta ocasión, mi maridaje ha variado  un poco ya que me ha parecido interesante presentarlas un producto que mezcla El Oro Líquido con el Oro Negro: El Aceite de Trufa.


Comentarios

Entradas populares